Encripdata

El hilo invisible entre el crimen y el poder

«Arrepentido» y en solitario, Fargeta pidió un nuevo un juicio abreviado para dejar atrás el «Narcogolf»

Días decisivos para Fargeta y compañía por el "Narcogolf"

Días decisivos para Fargeta y compañía por el "Narcogolf". Crédito: Ministerio de Seguridad.

Contra reloj, Sebastián Fargeta apuró un nuevo juicio abreviado para recuperar de una vez por todas la libertad luego de pasar más de cuatro años bajo prisión preventiva por el «Narcogolf». Como otro de los acusados echó a perder el acuerdo alcanzado en noviembre con el fiscal de juicio Rodolfo Molina, Fargeta propuso resolver su situación procesal con un juicio abreviado solo para él, según pudo confirmar Encripdata. Para eso, argumentó que había declarado como «arrepentido» y que había aportado información a la investigación y que, por lo tanto, ahora necesitaba resguardar su integridad frente al resto de los acusados en un juicio que comenzará el miércoles 8 de junio.

Fargeta, representado por el defensor público Gastón Barreiro, y la fiscal general María Ángeles Ramos acordaron una pena de 5 años y 6 meses de prisión y ahora quedaron a la espera de lo que decida el Tribunal Oral en lo Criminal Federal 2 de La Plata.

Las partes le solicitaron al tribunal que tenga en cuenta el artículo 51 del nuevo Código Procesal Penal Federal (CPPF): «Unión y separación de juicios. Los juicios se realizarán en el distrito judicial donde se produjeron los hechos. No obstante, las partes podrán solicitar su unificación y el juez decidirá la realización separada o conjunta, según convenga por la naturaleza de los casos, para evitar el retardo procesal o para facilitar el ejercicio de la defensa».

El defensor público remarcó la necesidad de evitar el retardo procesal: al igual que los otros acusados, Fargeta lleva ya 4 años, 4 meses y 5 días bajo prisión preventiva -primero en una cárcel y luego en la casa para cuidar a su madre-, cuando la regla general es que la preventiva puede extenderse por dos años y en casos excepcionales, por tres, pero no mucho más, por lo que de aprobarse el nuevo juicio abreviado, podría solicitar la libertad condicional inmediata al haber cumplido sobradamente los dos tercios de la pena.

En tanto, los argentinos Elías Exeni y Pablo Portas Dalmau y los colombianos Héctor Alfonso Cabrera y Luis Alberto Quintero serán enjuiciados desde la próxima semana acusados de formar una organización narcocriminal que pretendía «bombardear» 428 kilos de cocaína para vender en Buenos Aires y otros 300 kilos para «coronar» en Europa.

Exeni, alias «Turco», fue el que rechazó en noviembre firmar el juicio abreviado que le convenía a todos, pero que a él le daba igual porque tenía otras cuentas pendientes por resolver.

La operación «Narcogolf» destapó conexiones por todas partes: a través de Exeni, con el doble crimen de Icaño, en el que mataron a su madre y su padrastro, en lo que pareció ser un ajuste de cuentas, y la ruta de precursores químicos de los hermanos sirios Barakat en Catamarca; a través de Portas Dalmau, con Diego Xavier Guastini, su jefe en el tráfico de dólares y euros entre Argentina, Ecuador, México y España.

Y a través del propio Guastini, asesinado el 28 de octubre de 2019 en Quilmes, las conexiones llegaban hasta los casos «Leones Blancos«, por el que el fiscal Claudio Scapolan, apartado de sus funciones previo al jury de enjuiciamiento, el clan Loza y el clan Atachahua Espinoza, a la espera de sentarse en el banquillo de los acusados.

La primera pista del «Narcogolf» la dio la Agencia Federal de Inteligencia (AFI) en agosto del 2017. Guastini, casualmente, era informante de la agencia. Según esa pista, Fargeta viajó a Bolivia para comprar un cargamento de cocaína junto con los colombianos Germán Augusto Correa Calderón y Hernán Guerly Raigoza Martínez. Guastini, no tan casualmente, había hecho un negocio con Correa Calderón vinculado a «Leones Blancos».

Aunque los detectives pudieron desbaratar la estructura local de la organización narcocriminal, como suele pasar en este tipo de investigaciones, de Correa Calderón y Raigoza Martínez, tal vez los jugadores importantes de esta historia por sus conexiones más allá de la frontera, nunca se supo más.

About Author