Condenan al destierro a Mekky por mover cocaína: el jefe de Los Suecos vuelve a Dinamarca
Por segunda vez en un año, Amir Faten Mekky fue expulsado de un país: primero de España por bañar de sangre la Costa del Sol y ahora de Suecia por llenarla de cocaína. Un tribunal de Malmö lo condenó a 12 años de prisión por varias operaciones de narcotráfico internacional y, finalmente, al destierro a Dinamarca. Allí o adonde vaya por siempre lo acompañará su título en el bajomundo europeo: ser el jefe de Los Suecos, una oficina de encargos que organizaciones narcocriminales contrataban para ajustar cuentas sin ensuciarse las manos.
De 27 años, Amir nació el 6 de mayo de 1997 en Copenhague, Dinamarca, pero gran parte de su corta vida la hizo en Malmö, Suecia. Su familia es de origen iraní.
Al mediodía del 12 de mayo de 2018, Los Suecos ejecutaron al español David Ávila Ramos, alias «Maradona», mientras se subía al Audi. Su familia presenció todo. Acababan de celebrar la comunión de su pequeño hijo en la Iglesia de la Virgen del Rocío, San Pedro Alcántara. Este miembro de Los Gordos hizo negocios con los argentinos José Gonzalo Loza y Diego Xavier Guastini, como reveló Encripdata.
Tres meses después, el 20 de agosto de 2018, la organización de Mekky mató al español-marroquí Sofian Ahmed Barrak, alias «Zocato», en plena madrugada en la puerta de su casa en Villa del Campanario, Estepona, de la que salió engañado por un mensaje de Encrochat.
Para el fiscal de juicio Carlos Tejada, las dos víctimas hicieron negocios juntos, pero, a principios del 2018, como «Maradona» no quería saldar las cuentas pendientes, «Zocato», tras mandarle dos avisos, finalmente contrató a Los Suecos para que le cobraran la deuda con su vida. Y eso fue lo que pasó aquel sábado soleado con sus pequeños hijos y la Virgen del Rocío como testigos involuntarios. Tres meses después, siempre según la teoría del caso oficial, como «Zocato» no quería pagar el servicio por el encargo cumplido, la organización de Mekky le tendió una trampa para darlo de baja de la lista de clientes.
Sorpresivamente, tras un acuerdo entre las partes, la Audiencia Provincial de Málaga dio a conocer en el 2023 el veredicto del jurado popular: culpables de dos hechos de homicidios. En consecuencia, el tribunal condenó a solamente 12 años de prisión a Ahmad Abdul Karim, el autor material de los disparos que acabaron con «Maradona» y «Zocato» y con la inocencia de la Costa del Sol, una zona donde todavía es posible dormir sin ponerle llave a la puerta.
De 30 años, Ahmad nació el 26 de junio de 1994 en Bagdad, Irak, pero hasta entonces repartía su tiempo entre Malmö, Suecia, y Marruecos. Pero el asesino hizo una confesión a medias: reconoció su autoría, pero dijo que todo se trató de «desaveniencias por motivos personales».
La estrategia de defensa, liderada por Gonzalo Boyé -también abogado del expresidente de la Generalidad de Cataluña Carles Puigdemont– sirvió para dejar a un paso de la libertad a Amir: el tribunal sentenció al jefe de Los Suecos a solo 2 años, 9 meses y 26 días de prisión por haber sido cómplice de Ahmad en el crimen de «Zocato», pero no en el de «Maradona». Y esa pena fue el tiempo que había pasado bajo prisión preventiva, primero en Emiratos Árabes Unidos y luego en España.
Karim Abdul Karim y Fakhry Mekky, hermanos de los otros condenados, también cumplieron las penas acordadas con el fiscal y el abogado de la acusación particular, Juan Urbaneja, en representación de la familia de «Zocato». Sin embargo, Karim deberá pasar 35 años encerrado por atentar con bombas contra propiedades de un empresario en la zona de Marbella.
Tras el sorpresivo final en la Costa del Sol, las autoridades de Suecia debieron apurarse para tramitar la extradición de Mekky antes de que fuera expulsado de España, que no era otra cosa que moverse libre en otro país. La orden europea de detención llegó justo a tiempo.
Finalmente, esta semana, un tribunal lo encontró culpable por varios hechos de narcotráfico, como movimientos de 20 kilos de cocaína hacia Dinamarca, 3 kilos hacia Estocolmo y un kilo más hacia en Malmö. Según informó Ekstra Bladet, durante el debate, Mekky reconoció su participación. Las operaciones internacionales empezaban en Hoofddorp, un suburbio de Ámsterdam.
Tal vez sea cierto que Los Suecos operaban para Ridouan Taghi y sus Ángeles de la Muerte, la línea más fuerte de la Mocro Maffia, la organización que amenazó de muerte a la hija mayor de los Reyes de los Países Bajos.